Cuando pinto expreso una visión de mi mundo. He tratado de hablar de la vida que se puede encerrar en lo vegetal, contraponiéndola como he hecho con mis fondos a la dureza de lo mineral.

Me apeteció indagar en otros lenguajes, pensando en el dialogo oculto que se da entre lo blando y lo duro, lo amable y lo ofensivo, el egoísmo y la generosidad, el poder y las emociones.

Creo que en mi trabajo ofrezco una visión del mundo, confiado, pero no ingenuo. Me parece que da cuenta del gozo de vivir.